Uno de los servicios que más demandan las empresas a una agencia externa de comunicación es el envío de notas de prensa. Se trata de un instrumento de toda la vida, útil, directo, claro y básico para que el público sepa lo que una organización quiere decir. Pero, del otro lado, en las redacciones, también puede ser un motivo de odio. Yo, que he estado en ambos zapatos (en los de la redactora que recibe y edita, y en los de la asesora de comunicación que envía la notita) sé que hay dos razones básicas por las que no todo es noticia. Y también hay alguna que otra circunstancia más que puede dar al traste con la publicación de un comunicado.
De todo eso he querido escribir en esta entrada del blog de Araceli. Porque es común que te encomienden el envío de comunicados y que esperen que por arte de magia al día siguiente el contenido esté tal cual en todos los medios de comunicación que el cliente conoce. Y no. No todo es noticia. Todo influye y, lo principal, es que la información interese.
¿Es interesante su contenido?
No hay forma más clara y persuasiva para anunciar noticias sobre una organización, sus productos y aplicaciones que la emisión de un comunicado.
Pero una verdad como un templo es que un periodista solo utilizará la información que le envíes en un comunicado si considera que es noticia. Y, ¿qué determina que algo sea noticia? Pues básicamente que sepa que su contenido genera interés. Simple, ¿verdad?
Pues la experiencia me dice que no tanto. Porque a todo el mundo le gusta su libro y tiende a creer que todo lo que tenga que ver con él va a interesar al resto. Y quizá no es así.
En general, algo tendrá interés…
- Si afecta a una organización, a una comunidad, a una localidad o incluso a la sociedad en general.
- Si es poco habitual. Siempre se dijo aquello de que no es noticia que un perro muerda a un hombre, sino al revés.
- Si el hecho que quieres comunicar está inmerso en una disputa o en algún tema laboral relevante.
- Si el protagonista de la noticia es alguien conocido, o si quien habla es el mayor representante de la organización.
- Y si es actual.
Los medios son empresas y viven de la publicidad
Pero, ahora, míralo del otro lado. ¿Crees que otra empresa va a ayudarte a anunciar tus productos / servicios / eventos / etc. porque sí? A veces se nos olvida, pero los medios de comunicación son empresas que viven de la publicidad.
Por ello, influye muy mucho en la publicación de notas de prensa, además del interés que genere la información, la relación que el anunciante y el medio de comunicación tengan.
Entendiendo anunciante como el protagonista de la nota de prensa, claro. Porque, al final, lo que la nota de prensa consigue es publicidad o, mejor dicho, publicity. Un concepto difícil de cuantificar que mide la efectividad de las acciones de comunicación que no están enmarcadas en la publicidad en sí misma.
No todo es noticia: publicidad y publicity
Te cuento: publicidad y publicity no son lo mismo.
Su principal diferencia reside en que en la publicity no hay pago de por medio entre un anunciante y un medio de comunicación, sino que se consigue mediante la labor de un gabinete de prensa, que genera una información interesante para el público, que a su vez va a aumentar los lectores y el tráfico en las webs de los medios. Así todos ganan.
¿Y cómo se mide la publicity? Pues básicamente en lectores y en una valoración económica del espacio que han ocupado las noticias generadas en los medios de comunicación. Pero aquí también se puede tener en cuenta una valoración cualitativa de los medios. Porque no es lo mismo que te publiquen en un medio generalista, o en otro donde sabes que lee tu público.
¿Y qué pasa si la información no es lo suficientemente interesante como para que la publiquen? ¿O si tiene un tufo a publicidad que no puede con él?
Ese es el rollo. Si la información no es lo suficientemente interesante, habrá que elaborar un plan de comunicación que no solo tenga en cuenta notas de prensa que los medios nos publiquen gratis, sino también alguna que otra campaña publicitaria para que cuando llegue la nota el periodista, el gerente o el director la miren con otros ojos.
Otras circunstancias
Al comienzo de esta entrada del blog de Araceli te comentaba que yo, que he estado en los zapatos del redactor que edita notas de prensa, sé que hay circunstancias que pueden hacer que los comunicados se odien.
Habrá más, pero creo que las más comunes son dos: la difusión y el horario.
Porque las notas de prensa se difunden a toda la base de datos de contactos de medios de comunicación. Puede ser que un periodista lleve algún tiempo pidiéndote la información que estás difundiendo, y que se enfade mucho cuando vea en su correo electrónico que su noticia la tiene él y su competencia.
No todo es noticia: el horario
¡Ay, el horario! Batallita: Viernes, ya de noche. Salía yo de la redacción con mis páginas entregadas y a tiempo para tomar unas tapas cuando, con los pies ya en la calle Convento, me llamaron para decirme que un ferry de Ceuta y un petrolero habían chocado en el Estrecho de Gibraltar. Ay. Se acabaron las tapas. De vuelta a la redacción, a hacer llamadas, rehacer planillos, buscarle hueco y escribir.
De repente al escribir planillo me he sentido vieja… quizá en los digitales se han quedado obsoletos… Pero lo que sí sigue vigente es que las noticias ocurren cuando ocurren, y cualquiera que trabaje en esto entiende que si está en la calle y «explota» algo debe volverse sobre sus pasos para contarlo lo mejor posible. En eso consiste esto del periodismo.
Otra cosa es que llegue tarde una nota de prensa. La cosa cambia mucho. Pueden lanzar sobre ti sapos y culebras si la nota que llega tarde no merece la pena y obliga al redactor a quedarse un tiempo precioso más en la oficina. O si merece la pena y por ser tarde no la ha visto. Así que las notas, si es posible, tempranito.